Crianza Respetada y Juego Libre en La Casa Naranja.

001 invite (1)«Un niño avanza con el cochecito de bebés de madera y choca contra las cosas, se frustra, grita, llora mientras forcejea, reacomoda las ruedas, retrocede… ¡solo para volver a chocar, gritar, frustrarse y forcejear de nuevo! Le narramos lo que sucede, sin juzgar, sin reprimir, aceptamos su dificultad y nos mostramos soportativos, presentes y respetuosos de su dificultad. El niño, al final de la hora de juego, se retira feliz, sonriente (y bastante poco cansado, hay que decirlo!).»
«En otra ocasión una niña tironea de un muñeco sin lograr arrebatarlo de las manos de su amigo. Lo piensa un poco, se aleja, regresa y le dice: ¿Das? El niño esconde las manos atras, salvaguardando su tesoro. Miramos, relatamos lo que sucede, confiamos, esperamos… El niño suavemente desliza la manita hacia adelante y entrega el muñeco, gira y suspira satisfecho volviéndose a enfrascar en su propio juego.»

«Es hora de cantar la canción de despedida y volver a casa. Una niña empieza a tirar todo lo que hay en el estante de la biblioteca y los pequeños muñecos al suelo.

– Veo que estás tirando las cosas al piso. Entiendo que te quieras quedar pero ahora se terminó el tiempo para jugar.

– ¡No quiero!, grita y se tira al piso a llorar a los gritos.

Nos acercamos, le brindamos comfort con respeto, permitiendo que exprese su frustración.

– No te querés ir, te entiendo. Podés llorar si lo necesitás. Es difícil no poder elegir por vos misma. ¿Te gustaría llevarte un libro de la biblioteca después de que volvamos a guardar los juguetes?

La niña para de llorar en el instante, elige un libro y satisfecha se acerca hacia la puerta.»

Estas pequeñas situaciones de vida en La Casa Naranja despiertan muchas veces el deseo en los adultos de compartirlas, de hacer preguntas, de comparar con situaciones similares fuera del grupo de juego, en la vida cotidiana.
Así surgió la idea de crear El CÍRCULO DE CRIANZA como un espacio para todas las familias interesadas (asistan sus hijos o no a los talleres de juego). Es el espacio para adultos donde los grandes también tenemos la posibilidad de mirar la crianza y sus desafíos con nuevos ojos, ampliando la confianza en nosotros mismos y disfrutando también nosotros del la satisfacción plena de dar y tomar lo que cada uno necesita.

Con modalidad de seminario/taller, cada encuentro se centra en un tema específico y está abierto a la consulta de casos que puedan ser de interés para todos en el círculo (los límites y el respeto, creación de espacios de juego adecuados en casa, desarrollo de la creatividad, inteligencia emocional, autoestima y autonomía, etc.). Se contempla siempre un momento para el intercambio y otro para la elaboración personal de las propias conclusiones y recursos para una crianza basada en el respeto y la libertad.

2 Comments

  1. Yo ya soy bisabuela pero, como me hubiera gustado poder contar con un espacio como este cuando criaba a mis hijos…! Excelencia como siempre, clara, didáctica, inteligente. Te felicito!

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