Existen escuelas de todo tipo para los niños, pero no suelen ofrecer como materia de estudio cómo ser hijos. Del mismo modo, no existen escuelas para padres. Como dice el poeta, “se hace camino al andar”. ¡Esto no significa que los padres no podamos aprender! Solo nos recuerda el valor de ser autodidactas.
Veamos algunas de las similitudes que existen entre padres y autodidactas:
– A los autodidactas los estimula juntarse con otros autodidactas. A los padres y madres nos ayuda compartir experiencias y estrategias con otros padres y tendemos a hacerlo de manera espontánea cada vez que podemos: en el supermercado, en la plaza, en la puerta de la escuela de los chicos. Aunque nos parezca mentira, el solo hecho de saber que otros tienen las mismas dificultades que nosotros y pasan por los mismos desafíos produce un enorme alivio y… ¡nos ayuda a encontrar nuevas soluciones!
– Los autodidactas toman solo la información que les interesa. Madres y padres estamos a menudo bombardeados por una cantidad de información que nos desborda y que muchas veces es contradictoria. Confiar en el propio criterio y tener el coraje de sostener nuestras decisiones más allá de la opinión de terceros suele ser un excelente recurso para aprender a ser cada vez mejores padres. Actuaremos con claridad y seremos constantes con nuestros hijos, porque realmente confiamos en lo que hemos decidido.
– Los autodidactas también pueden aprender de otras maneras (por ejemplo yendo a la escuela). Del mismo modo, nosotros podemos asistir a grupos de formación para padres o grupos de crianza. Allí, con la coordinación de un profesional o del mismo grupo autodirigido, tendremos la doble ventaja de capitalizar la experiencia y los conocimientos de los demás así como de compartir los nuestros.
En verdad, lo único que nos hace falta para poder aprender a ser padres es reconocer justamente eso: que estamos aprendiendo.
“Quien pretenda educar deberá autoeducarse durante toda la vida». Rudolf Steiner
Más lecturas sobre el tema: Serie Criar en Positivo.
Los desacuerdos primarios y su influencia en la educación de nuestros hijos (2º entrega).
Educar para la felicidad. (Serie Criar en Positivo – 3° entrega).
Educar para la vida (Serie Crianza en Positivo – 4º entrega)
Si quisieras formar parte de un grupo de madres y padres que indagan estos temas en forma comprometida tal vez también te interese: Círculo de Crianza en La Casa Naranja